Historiadores como ideólogos


 La historia ha jugado un papel clave en la estructuración de ideologías y doctrinas políticas. Los historiadores han buscado respuestas 
a las problemáticas en el pasado; han tratado de encontrar soluciones y han identificado periodos y ejes económicos brillantes de sus comunidades para replicarlo, como es el caso del nacionalismo o la creación de identidad local.


A nivel mundial vemos a Carlos Marx desarrollando el materialismo histórico que nutriría en lo político al marxismo. Toda la explicación referente a lo económico como la infraestructura que influye directamente en aspectos superestructurales como la religión, la cultura y la misma política.


Los nacionalismos alemán e italiano buscaron retornar al esplendor de Imperio Sacro Germánico y el Imperio Romano, respectivamente.


Los historiadores como ideólogos han tomado dos ejes, en primer lugar teorizar sobre la doctrina, identidad y mística de su partido o corriente ideológica.

Cruzando y aterrizando su perspectiva con la historia del país y localidad donde quieren aplicar la doctrina política.


En México, los historiadores jugaron un papel muy trascendente en la construcción de las ideologías políticas, por lo que escribieron importantes obras que buscaban explicar y justificar su perspectiva. Así tenemos los casos de:


Fray Servando Teresa de Mier, defensor de la independencia de México y de la república centralista. Quien desde 1794 en su famoso sermón guadalupano, se basó en la historia prehispánica para dar una explicación diferente sobre las apariciones para que sirviera de base de un nacionalismo. 

Posteriormente fray Servando regresaría a la historia y escribiría una historia de la Independencia de la Nueva España para mostrar en Europa que la lucha insurgente era justa.

Mier fue el gran impulso para que viniera a América,  Francisco Xavier Mina.  Después ya lograda la independencia, fray Servando optó por apoyar la república centralista tomando en cuenta las características históricas de la naciente nación.


Carlos María de Bustamante, por un lado escribió sobre la historia de la independencia y por el otro, se enfocó a probar que Texcoco sería la capital ideal del Estado de México, gracias al recuerdo de su historia prehispánica y al reinado de Nezahualcóyotl, por eso escribió: Texcoco en lo últimos tiempos de sus antiguos reyes.

Bustamante buscaba encontrar en el pasado un modelo para la nación. 

Bustamante había salido de las filas de Morelos, era de sus creativos o intelectuales. Es importante recalcar que Morelos fue un gran visionario y estratega militar, pero que tenía junto a él a un equipazo. En lo ideológico tuvo a personas como Andrés Quintana Roo, Leona Vicario y Carlos María de Bustamante. En lo militar lucharon en su ejército personas como: Hermenegildo Galeana, Mariano Matamoros y Nicolás Bravo.


Los conservadores tuvieron como gran ideólogo a Lucas Alamán. Hombre innovador en aspectos económicos y tecnológicos. Sin embargo, siempre consideró que en materia política era mejor un cambio gradual y dirigido. La historia le sirvió constantemente para identificar los elementos de la vida cultural y política que eran

necesarios conservar como el hispanoamericanismo. Lucas Alamán escribió una importante historia de la independencia y sería el ideólogo en los gobierno de Anastasio Bustamante y al principio de la dictadura de Santa Anna.


Los liberales tendrían como gran ideólogo a José María Luis Mora, nacido en Chamacuero, hoy Comonfort, Guanajuato. Mora escribió una obra clásica de la historiografía de las luchas sociales: México y sus revoluciones, donde además de hablar sobre la independencia, tomó en cuenta algunos movimientos de la época colonial. Mora apoyó a Carlos María de Bustamante en su idea de que la capital ideal del Estado de México era Texcoco. Don José María Luis Mora sería el gran ideólogo en el gobierno de Valentín Gómez Farías, donde se inició la reforma, por medio de una serie de disposiciones radicales, que buscaban una independencia ideológica y estructural de México.


Fray Servando Teresa de Mier y Carlos María de Bustamante, voltearían hacia el pasado indígena, es decir, al indígena muerto y a esa etapa idílica para buscar de una u otra forma restaurarla. Lucas Alamán, por su parte, haría énfasis en el pasado hispano, haciendo hincapié en conservar la cultura que nos había legado la madre patria.


Por su parte Mora, analizaría el pasado, para romper con las cadenas y buscar una nueva alternativa muy diferente a la que había vivido los mexicanos, en el marco del liberalismo y el capitalismo.


En el siglo XX destacaron como ideólogos que escribieron historia: Anacleto González Flores, José Vasconcelos, Miguel Othón de Mendizábal, Manuel Gómez Morin y Vicente Lombardo Toledano


Si bien los historiadores han jugado un papel muy importante en la construcción de ideologías, su papel ha sido más el de consejeros y asesores, que el de estar al frente de la política. Esto nos lleva a reflexionar qué tanto conviene seguir sólo como creativos - intelectuales o si deben dar un paso más y buscar conquistar el poder.

Omar Tinajero Morales es licenciado en etnohistoria por la ENAH; Maestro en Estudios Regionales por el Instituto Mora y estudió el doctorado en Geografía por la UNAM. Está certificado en Marketing Digital por Google; en Comercio Electrónico por EOI  y diplomado en Integridad Web y en Gestión de Ambientes Virtuales de Aprendizaje por la Fundación Carlos Slim.



Director del Centro de Estudios del Acolhuacan Santo Domingo Porta Coeli Tepetlaoxtoc (CEASDP) y de la librería digital Fray Juan de la Magdalena. Consultor y asesor en Marketing de Contenido aplicado al Turismo y al desarrollo Pyme. Puedes contactar con él en las siguientes plataformas  digitales:

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